Tener mascota representa una gran responsabilidad, por un lado, por razones de salud mutua, por el otro, por razones humanitarias. Los animales, al igual que los seres humanos, desarrollan infecciones comunes, pero ellos, distinto a nosotros, no pueden atenderse por sí mismos, por eso debemos ser cuidadosos en el cuidado de la salud propia y la de la mascota. Para evitar que sus infecciones nos afecten hay que mantenerlos desparasitados, en el caso de gatos y perros, hay que tratarlos con medicamentos que eviten las alergias debido al pelo, también, hay que cepillar sus dientes una vez al mes con dentífrico de uso veterinario y mantener muy limpias las áreas comunes. Tener mascota implica aceptar el compromiso de cuidarlas, alimentarlas, darles salud, amor y compañía, cuidados a los que ellos retribuyen con lealtad, afecto y su colaboración valiosa en nuestro bienestar físico y emocional. Por eso familia, las mascotas son un miembro más de la familia, ellas hacen nuestra vida cotidiana mucho más llevadera, más plena, siempre en medio de nuestra agitada agenda, nos arrancan una sonrisa, por eso amigos no se priven de la experiencia maravillosa de tener una mascota.
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